Lamentablemente, es relativamente frecuente que perdamos o que (incluso peor) nos roben las tarjetas bancarias. A veces, llevamos la cartera en el bolsillo trasero, un lugar ideal para los ladrones. El robo, obviamente, también puede ser violento. Y por último, otras veces somos nosotros los que, en un despiste, nos olvidamos de la cartera o descuidamos la tarjeta. Para evitar que esto dé lugar a su uso fraudulento, y que se realicen pagos no autorizados con ella, está la posibilidad de solicitar la anulación de la tarjeta. En el caso de pérdida o sustracción, la cancelación suele ser temporal y la entidad bancaria cursará una nueva tarjeta, cancelando de inmediato los pagos que puedan haberse realizado en el periodo que ha transcurrido desde la pérdida.
Evidentemente, la posibilidad de cancelar una tarjeta de crédito o de débito no se limita al robo, sustracción o pérdida. Podemos solicitar la cancelación cuando queramos, porque no queremos seguir usando el servicio o porque hemos decidido cambiar de banco. Ahora bien, muchos bancos exigen acudir a la oficina donde contrataste la tarjeta para proceder la anulación.
Esto es una diferencia importante entre los neobancos y los bancos tradicionales, que suelen exigir la presencia física para cancelar o, al menos, que realices una llamada. Ya sabemos la eficacia que suelen tener las llamadas telefónicas. Al final, acaba siendo preferible acudir en persona. En un neobanco o en la banca online, los trámites son por Internet, lo que simplifica y agiliza los trámites. En cambio, cancelar una tarjeta Banamex o de otras entidades suele requerir que acudas a la oficina gestora.
¿Cómo cancelar una tarjeta de débito?
Antes de cancelar una tarjeta de crédito o débito y darla de baja, es necesario pagar las deudas. Esto es imprescindible. Te recomendamos que te asegures que no pagas de más, pues en caso contrario será muy difícil revertir la liquidación y podrías verte envuelto en una espiral de trámites administrativos.
Una vez realizada la liquidación correctamente, debes notificar a tu banco. Esto puedes hacerlo de dos formas: yendo personalmente a la sucursal o llamando por teléfono. Los bancos tradicionales como Banamex no ponen tan sencilla la tramitación online, de modo que lo mejor es optar por una de estas dos vías.
Asegúrate de haber redactado antes un escrito en el que solicitas la cancelación. En ese documento deben constar tus datos personales y los de la tarjeta de débito o crédito que quieres cancelar. Conviene también que dispongas de un comprobante que refleje tu saldo a la fecha, que debe ser cero. En la sucursal podrán exigirte que entregues la tarjeta de vuelta, pero no cobrarte una comisión.
Diferencias entre las tarjetas de crédito y débito
¿Hay diferencias entre la tarjeta de crédito y la de débito? A efectos de cancelación, básicamente ninguna. Ahora bien, en una tarjeta de débito no es posible acumular un saldo deudor: solo se cobra hasta el límite disponible. En cambio, con la tarjeta de crédito el cliente puede pagar una compra aunque no disponga de fondos, aplazando el cobro hasta el mes siguiente. De esta forma, el titular contrae una deuda con el banco. Además, las tarjetas de crédito permiten pagar a plazos financiando la compra.
Esto es algo a tener en cuenta en la liquidación que realices cuando desees cancelar tu tarjeta. En la de débito el saldo será cero o a tu favor, mientras que en la de crédito puede haber un saldo a favor del banco que, llegado el caso, podría incluso traspasarse a otro banco.