Los empleados que se enferman o sufren una lesión o dolencia tienen el derecho de solicitar una baja médica, también conocida popularmente como incapacidad temporal. Durante el período de la baja, tienen derecho a recibir una prestación por incapacidad temporal, aunque esta duración no será indefinida.

Según lo establecido en el artículo 169 de la Ley General de la Seguridad Social, la duración máxima de la incapacidad temporal es de 365 días. Sin embargo, en casos en los que se presume que durante ese período el trabajador puede ser dado de alta médica por curación, se puede extender hasta 180 días adicionales.

Qué debemos saber sobre la baja laboral

Por consiguiente, cuando una persona alcanza los 365 días (es decir, un año) de incapacidad temporal sin haber recuperado, se inicia una nueva fase con modificaciones que impactan en la gestión de la incapacidad.

De acuerdo con la ley, una vez transcurridos los 365 días, la inspección médica del Instituto Nacional de la Seguridad Social asume la responsabilidad exclusiva de emitir el alta médica por curación, basada en mejoras que permiten la reincorporación al trabajo, la propuesta de incapacidad permanente o la falta injustificada a los exámenes médicos convocados por dicha entidad gestora. 

Esto implica que la Seguridad Social se hace cargo del asunto, reemplazando así la decisión previa que recaía en el médico de cabecera o en la mutua colaboradora. Por consiguiente, una vez que el trabajador supere el año de baja, la Seguridad Social procederá a citarlo para una revisión en el tribunal médico. 

Durante esta evaluación, se llevará a cabo una inspección exhaustiva del estado del trabajador para determinar los próximos pasos a seguir. En este sentido, pueden ocurrir tres escenarios posibles:

Una de las posibilidades es que el tribunal médico declare el alta del trabajador. En tal caso, el trabajador regresará a su empleo y recibirá el salario correspondiente, tal como lo percibía antes de la incapacidad temporal.

Otra posibilidad es que se le proponga al trabajador solicitar una pensión de incapacidad permanente. En este caso, el trabajador deberá pasar por el proceso de evaluación de incapacidad permanente, el cual puede tomar hasta 135 días hábiles. 

Durante este período, según lo establecido en la Ley General de la Seguridad Social, el trabajador mejorará en la situación de prolongación de efectos económicos de la incapacidad temporal hasta que se emita la resolución que califique la incapacidad permanente.

Otra opción es que se prorrogue el cobro de la incapacidad temporal. En este caso, la Seguridad Social seguirá supervisando al trabajador y evaluando las posibilidades de recuperación. Durante este período de prórroga, se realizarán seguimientos y revisiones médicas para determinar si hay mejoras en el estado de salud del trabajador y si es posible su reincorporación al trabajo en un futuro.

Qué cantidad de dinero se puede percibir tras un año de baja laboral

Si el trabajador continúa en situación de incapacidad temporal, seguirá recibiendo la prestación por incapacidad temporal. La buena noticia es que durante este período, el trabajador seguirá percibiendo la misma cantidad que en el primer año de la baja.

De este modo, el trabajador recibirá al menos el 75% de la base reguladora, tal y como venía percibiendo previamente. No obstante, es altamente recomendable conocer las disposiciones establecidas en el convenio colectivo, ya que en muchos casos se amplía la protección hasta el 100% de dicha base reguladora.